Carreras y grados del oficial penitenciario

Cómo convertirse en un oficial penitenciario

Los oficiales correccionales y penitenciarios supervisan y administran a las personas que han siendo detenidas. Esa detención podría ser por períodos cortos de tiempo, como antes de una audiencia de la corte, o para el largo plazo, como sería el caso con un preso cumpliendo una condena de prisión.
Ingresar a una profesión de este tipo requiere una amplia formación y educación. Sin embargo, no se precisa de un título formal; la formación específica, tanto en el trabajo como en academias especiales, enseñará a los oficiales correccionales todo lo que necesitan saber acerca del manejo de los detenidos. Esta guía dará una visión general de la carrera y lo que se necesita para convertirse en uno.

¿Qué hace un oficial correccional?

Lo básico

Los oficiales correccionales tienen la función principal de mantener el orden dentro de un centro de detención, como una cárcel local o una prisión federal. Los detenidos que supervisará un oficial correccional pueden ser encarcelados por cualquier número de razones, que van desde la espera de una audiencia en la corte por un delito menor hasta la muerte en el corredor de la muerte. Esto significa que las tareas cotidianas de un oficial correccional pueden variar ampliamente. Algunos trabajarán en el transporte, llevando a los prisioneros a la corte. Otros rara vez tienen contacto con prisioneros, y en su lugar trabajan en las áreas administrativas. Otros trabajarán “en el terreno” en todo momento, supervisarán las actividades de los presos, buscarán en las celdas el contrabando, supervisarán visitas ocasionales con la familia, escoltarán a los reclusos a la enfermería y otras tareas necesarias.

En profundidad

Al igual que muchos otros empleos, no todos los oficiales correccionales tienen las mismas tareas básicas. Algunos tienen entrenamiento especial para tratar con reclusos violentos o disturbios a gran escala. Estos oficiales están altamente capacitados y pueden asistir a sesiones de entrenamiento una vez al mes o más para mantener frescas sus habilidades. Otros  pasan menos tiempo manteniendo el orden dentro de la prisión y más tiempo ayudando a rehabilitar o asesorar a los reclusos. Estos oficiales pueden tener un título en orientación o psicología, o ser entrenados como un experto en rehabilitación. También hay oficiales correccionales que tienen deberes de supervisión y monitorean a los oficiales que están monitoreando a los reclusos. Los deberes administrativos podrían incluir trabajar en estrecha colaboración con funcionarios locales, estatales y federales-dependiendo del nivel de seguridad de la prisión- para asegurar que todo funcione de manera suave y eficiente en todos los niveles.

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